[Officium] Dominica XXI Post Pentecosten [Rule] Gloria Credo Prefatio=Trinitate Suffr=Sanctorum;Maria3,Ecclesiae,Papa;; [Introitus] !Est 13:9-11 v. Todo está en tus manos, Señor, y no hay quien pueda resistir a tu poder; tú lo has creado todo, el cielo y la tierra y cuanto en ellos se contiene. Tú eres Señor de todo. !Ps 118:1 Dichosos los limpios de corazón; los que andan por el camino de la ley de Dios. &Gloria v. Todo está en tus manos, Señor, y no hay quien pueda resistir a tu poder; tú lo has creado todo, el cielo y la tierra y cuanto en ellos se contiene. Tú eres Señor de todo. [Oratio] Te suplicamos, Señor, que guardes con perpetua clemencia a tu familia, a fin de que, con tu protección, se vea libre de todo mal, y te sirva santamente. $Per Dominum [Lectio] Lección de la carta del Apóstol san Pablo a los Efesios !Ef 6:10-17 Hermanos: Buscad vuestra fuerza en el Señor y en su invencible poder. Poneos las armas de Dios, para poder afrontar las asechanzas del diablo, porque nuestra lucha no es contra hombres de carne y hueso sino contra los principados, contra las potestades, contra los dominadores de este mundo de tinieblas, contra los espíritus malignos del aire. Por eso, tomad las armas de Dios para poder resistir en el día malo y manteneros firmes después de haber superado todas las pruebas. Estad firmes; ceñid la cintura con la verdad, y revestid la coraza de la justicia; calzad los pies con la prontitud para el evangelio de la paz. Embrazad el escudo de la fe, donde se apagarán las flechas incendiarias del maligno. Poneos el casco de la salvación y empuñad la espada del Espíritu que es la palabra de Dios. [Graduale] !Ps 89:1-2 Señor, tú has sido nuestro baluarte, de generación en generación. V. Antes de engendrarse los montes, antes de nacer el orbe de la tierra, de eternidad a eternidad tú existes, oh Dios. Aleluya, aleluya. !Ps 113:1 Cuando Israel salió de Egipto, los hijos de Jacob de un pueblo extranjero. Aleluya. [Evangelium] Continuación + del Santo Evangelio según San Mateo !Mt 18:23-35 En aquel tiempo: Dijo Jesús a sus discípulos esta parábola: Se parece el reino de los cielos a un rey que quiso ajustar las cuentas con sus criados. Al empezar a ajustarlas, le presentaron uno que debía diez mil talentos. Como no tenía con qué pagar, el señor mandó que lo vendieran a él con su mujer y sus hijos y todas sus posesiones, y que pagara así. El criado, arrojándose a sus pies, le suplicaba diciendo: “Ten paciencia conmigo y te lo pagaré todo”. Se compadeció el señor de aquel criado y lo dejó marchar, perdonándole la deuda. Pero al salir, el criado aquel encontró a uno de sus compañeros que le debía cien denarios y, agarrándolo, lo estrangulaba diciendo: “Págame lo que me debes”. El compañero, arrojándose a sus pies, le rogaba diciendo: “Ten paciencia conmigo y te lo pagaré”. Pero él se negó y fue y lo metió en la cárcel hasta que pagara lo que debía. Sus compañeros, al ver lo ocurrido, quedaron consternados y fueron a contarle a su señor todo lo sucedido. Entonces el señor lo llamó y le dijo: “¡Siervo malvado! Toda aquella deuda te la perdoné porque me lo rogaste. ¿No debías tú también tener compasión de tu compañero, como yo tuve compasión de ti?”. Y el señor, indignado, lo entregó a los verdugos hasta que pagara toda la deuda. Lo mismo hará con vosotros mi Padre celestial, si cada cual no perdona de corazón a su hermano». [Offertorium] !Job 1:1 Había en el País de Hus, en Idumea, un hombre llamado Job, hombre sencillo, recto y temeroso de Dios, al cual pidió Satanás para tentarle, y Dios le dio poder de dañarlo en sus bienes y en su carne. Perdió Job todos sus bienes y sus hijos, viendo sus carnes llagadas de graves úlceras. [Secreta] Recibe, Señor, propicio nuestras ofrendas, con las cuales quisiste ser aplacado, y concédenos la salvación por tu poderosa misericordia. $Per Dominum [Communio] !Ps 118:81; 118:84; 118:86 Mi alma ha esperado en ti, Salvador mío, y en tu palabra. ¿Cuándo harás justicia contra mis perseguidores? Los malvados me persiguen; ayúdame, Señor y Dios mío. [Postcommunio] Después de recibir, Señor, el sustento que da la inmortalidad, te rogamos que lo que hemos tomado lo sigamos con pureza de corazón. $Per Dominum