[Officium]
Feria Secunda infra Hebdomadam IV in Quadragesima

[Lectio1]
Lectura del santo Evangelio según San Juan
!Jn 2, 13-25.
En aquel tiempo: Estaba ya cerca la Pascua de los Judíos, y Jesús subió a Jerusalén, y encontró en el templo gentes que vendían bueyes, y ovejas y palomas. Y lo que sigue
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Homilía de San Agustín, Obispo.
!Tratado 10 sobre San Juan, después del principio.
¿Qué acabamos de oír, hermanos? Que aquel templo era sólo figura, y de él echó el Señor a todos los que buscaban sus intereses, a los que querían negociar. Y ¿qué cosas vendían en él? Las que necesitaban para los sacrificios de aquel tiempo. Conocéis bien que a aquel pueblo carnal y de corazón duro le fueron prescritos tales sacrificios que le impidiesen inmolar a los ídolos, y por esto inmolaban allí bueyes, ovejas y palomas. Lo sabéis por haberlo leído.

[Responsory1]
R. Vosotros que habéis de pasar el Jordán, edificad al Señor un altar, 
* De piedras que no hayan sido labradas por el hierro, y ofreced sobre él holocaustos y hostias pacíficas a vuestro Dios. 
V. Y cuando entrareis en la tierra que el Señor os ha de dar, edificad allí al Señor un altar. 
R. De piedras que no hayan sido labradas por el hierro, y ofreced sobre él holocaustos y hostias pacíficas a vuestro Dios.

[Lectio2]
Parece, pues, que no era gran pecado vender en el templo aquello que se adquiría para ofrecer allí, y con todo, el Señor los echó fuera. ¿Qué habría hecho si hubiese encontrado allí hombres sumidos en la embriaguez, aquel Señor que arrojó a los que vendían cosas lícitas, y que no violaban la justicia (pues lo que honestamente se puede comprar no es ilícito venderlo), y con todo los echó, no tolerando que la casa de oración se convirtiera en casa de negocio?

[Responsory2]
R. Atiende, Israel, a los preceptos del Señor, y escríbelos en tu corazón como en un libro. 
* Y te daré la tierra que mana leche y miel. 
V. Guarda, de consiguiente, y oye mi palabra; y seré enemigo de tus enemigos. 
R. Y te daré la tierra que mana leche y miel.

[Lectio3]
Si la casa de Dios no debe convertirse en casa de negocio, ¿deberá ser casa de bebida? Al oír semejantes palabras los culpables se enfurecen contra nosotros; pero nos consuelan las palabras del Salmo: Rechinaron contra mí sus dientes. Sabemos escuchar las palabras que pueden curarnos, por más que sus latigazos caigan a golpes redoblados sobre Jesucristo, puesto que es maltratada su misma palabra: Descargaron sobre mí sus azotes a porfía, sin saber por qué causa. Cristo fue azotado por los azotes de los Judíos; y ahora lo es por las blasfemias de los falsos cristianos. Multiplican los azotes contra su Señor Dios, y lo ignoran. Procuremos con la ayuda de su gracia, hacer lo que nos indica el mismo Salmo: Mas yo cuando ellos me atormentaban, vestía cilicio, y con el ayuno humillaba mi alma.

[Responsory3]
R. Así como estuve con Moisés, así estaré contigo, dice el Señor. 
* Esfuérzate y sé valeroso; introducirás a mi pueblo en una tierra que mana leche y miel. 
V.  No temas, porque yo estaré contigo; en cualquier parte que fueres, no te dejaré, ni te abandonaré: 
R. Esfuérzate y sé valeroso; introducirás a mi pueblo en una tierra que mana leche y miel. 
&Gloria
R. Esfuérzate y sé valeroso; introducirás a mi pueblo en una tierra que mana leche y miel. 

[Ant 2]
Quitad esto de aquí, * dice el Señor, y no convirtáis en un mercado la casa de mi Padre.

[Oratio 2]
Dios todopoderoso, te pedimos que la celebración anual de la santa cuaresma sirva para hacerte agradables nuestro cuerpo y nuestro espíritu.
$Per Dominum

[Ant 3]
Destruid este templo * y en tres días lo levantaré, dice el Señor. Pero Él hablaba del templo de su cuerpo.

[Oratio 3]
En tu bondad, Señor, escucha nuestra plegaria; y, ya que nos inspiras las súplicas, concédenos la fuerza de tu protección. 
$Per Dominum.