[Officium]
Feria Quarta infra Hebdomadam III in Quadragesima

[Lectio1]
Lectura del santo Evangelio según san Mateo
!Mt 15:1-20
En aquel tiempo: Ciertos escribas y fariseos que habían llegado de Jerusalén, se acercaron a Jesús, diciendo: ¿Por qué motivo tus discípulos traspasan la tradición de los antiguos? Y lo que sigue.
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Homilía de San Jerónimo, Presbítero.
!Libro 2 sobre los Comentarios acerca del cap. 15 de san Mateo.
Extraña es la necedad de los fariseos y escribas. Echan en cara al Hijo de Dios el que no guarde las tradiciones y preceptos de los hombres. “Tus discípulos, le dicen, no se lavan las manos antes de comer el pan”. Las obras que hay que lavar son las del alma, a fin de que se realice en ellas la palabra de Dios. Les respondió: “¿Por qué no guardáis los mandatos de Dios por causa de vuestras tradiciones?” Con una respuesta verdadera, refuta una falsa acusación. Por observar las tradiciones de los hombres incumplís los preceptos del Señor, ¿cómo acusáis a mis discípulos de menospreciar los preceptos de los mayores a fin de cumplir los preceptos de Dios?

[Lectio2]
Dios dijo: Honra al padre y a la madre; y el que les maldijere sea castigado con la muerte. Mas decís: Cualquiera que dijere a los padres: La ofrenda que yo ofreciere redundará en bien tuyo, ya no tiene obligación de honrarles. Según las santas Escrituras, el honor no consiste solo en las señales de respeto y atención, sino más bien en las limosnas y dones que se ofrecen. “Honra, dice el Apóstol, las viudas, que verdaderamente son tales”. Este honor significa asistencia. “Los presbíteros son dignos de un doble honor, principalmente los que trabajan en la predicación y en la enseñanza”. Está mandado tributarles asistencia: no cerremos la boca del buey que trilla, ya que el jornalero es digno de su recompensa.

[Lectio3]
El Señor, considerando la debilidad, edad o necesidades de los padres, había ordenado que los hijos les socorrieran con lo necesario para la vida. Mas, queriendo los escribas y fariseos cambiar esta sapientísima ley de Dios; a fin de velar su impiedad con el nombre de piedad, enseñaron a los hijos perversos, que si alguno quería ofrecer a Dios, que es Padre, alguna de las cosas que se debían a los padres, esta ofrenda a Dios fuera antepuesta a las ofrendas que querían hacerles. Los padres, no atreviéndose a tomar nada de lo ofrecido a Dios para no incurrir en sacrilegio, padecían miseria. Y las ofrendas de los hijos, con el pretexto de ser ofrecidas a Dios, servían de ganancia para los sacerdotes.

[Ant 2]
Escuchad y entended * la enseñanza del Señor.

[Oratio 2]
Concédenos, oh Señor, que instruidos con la práctica de los saludables ayunos, apartándonos de los perniciosos vicios, más fácilmente consigamos tu favor. 
$Per Dominum

[Ant 3]
Comer sin lavarse * las manos no mancha al hombre.

[Oratio 3]
Dios todopoderoso, a los que buscamos la protección de tu gracia, líbranos de todo mal y concédenos servirte con firmeza de espíritu.
$Per Dominum