[Officium] Dominica XVIII Post Pentecosten [Oratio] Dirige, Señor, nuestros corazones con la acción de tu misericordia; ya que sin tu ayuda no podemos complacerte. $Per Dominum [Lectio7] Lección del Santo Evangelio según San Mateo. !Mt 9:1-8 En aquel tiempo: Subiendo Jesús a la barca, atravesó el lago, y fue a su ciudad. Y lo que sigue. _ Homilía de San Pedro Crisólogo. !Sermón 50. Jesucristo, por sus actos humanos, obró misterios divinos, y valiéndose de recursos visibles realizó operaciones invisibles. “Subió a la barca, atravesó el lago y fue a su ciudad”. ¿No es el mismo que, separando las aguas, dejó al descubierto el fondo del mar, para que el pueblo de Israel pasase a pie enjuto, como por un desfiladero? ¿No es Él quien allanó debajo de los pies de Pedro las olas embravecidas, de suerte que el líquido elemento ofreciese un apoyo firme a sus plantas? [Lectio8] Qué razón tuvo para no usar en provecho propio de la obediencia del mar, y servirse de una barca para atravesar un lago tan reducido. “Subió a la barca y atravesó el lago”. ¿Qué hay en esto de extraño? Jesucristo vino a asumir nuestras debilidades y a comunicarnos su fuerza; a tomar lo que es humano y a cedernos lo que es divino: a recibir injurias y a conceder honores; a cargar sobre sí nuestros males y a traernos la salud; porque el médico que no conoce por experiencia propia la enfermedad, no sabe curar. [Lectio9] Si Jesucristo no hubiera descendido de la altura de sus perfecciones, nada habría tenido de común con los hombres; y si no se hubiera sujetado a la condición de nuestra vida corporal, en vano se habría revestido de nuestra carne. “Subió a la barca y atravesó el lago”. El Creador y Señor del universo empezó a tener una patria terrenal, hízose ciudadano judío, y comenzó a tener padres propios. Lo hizo para invitar por el amor, atraer por la caridad, ganar por el afecto y persuadir por la bondad, a los que habría retraído la autoridad, dispersado el temor y alejado el rigor del poder. &teDeum [Ant 2] Jesús dijo * al paralítico: Ánimo, hijo, tus pecados te son perdonados. [Ant 3] El paralítico * cogió la camilla en que estaba tendido y dio gloria a Dios. El pueblo, al verlo, glorificaba a Dios.