[Lectio1] Del Profeta Ezequiel !Eze 47:1-2 1 Obligome a volver hacia la puerta de la Casa, y vi que brotaban aguas debajo del umbral de la Casa hacia Oriente, pues la fachada de la Casa miraba al Oriente, y las aguas descendían hacia el lado derecho del Templo, al Mediodía del altar. 2 Y me condujo fuera de la puerta septentrional, e hízome dar la vuelta por fuera hasta la puerta exterior que cae de la parte del Oriente; y vi las aguas salir a borbollones por el lado derecho. [Lectio2] !Eze 47:3-5 3 Aquel personaje, pues, dirigiéndose hacia el Oriente, y teniendo en su mano la cuerda de medir, midió mil codos; y enseguida me hizo vadear el arroyo y me llegaba el agua a los tobillos. 4 Midió enseguida otros mil codos, y allí hízome vadear el agua, que me llegaba a las rodillas. 5 De nuevo midió otros mil, y allí hízome vadear el agua, la cual me llegaba hasta la cintura; y medidos otros mil, era ya tal el arroyo que no pude yo pasarlo, porque habían crecido las aguas de este arroyo profundo, de tal manera que no podía vadearse. [Lectio3] !Eze 47:6-9 6 Me dijo entonces: Hijo de hombre, bien lo has visto ya; e hízome salir y volviome a la orilla del arroyo. 7 Y así que hube salido, he aquí en la orilla del arroyo un grandísimo número de árboles a una y a otra parte. 8 Y díjome el Ángel: Estas aguas que corren hacia los montones de arena al Oriente y descienden a la llanura del Desierto, entrarán en el mar y saldrán, y las aguas quedarán salutíferas. 9 Y todo animal viviente de los que andan serpenteando por donde pasa el arroyo tendrán vida; y habrá allí gran cantidad de peces después que llegaren estas aguas, y todos aquellos a quienes tocare este arroyo tendrán salud y vida.