25 de septiembre _ San Fermín, Obispo mártir, S. - Rojo En Amiens de Francia, san Fermín, Obispo, el cual, en la persecución de Diocleciano, de orden del Presidente Ricciovaro, al cabo de varios tormentos, cortada la cabeza, alcanzó el martirio. † decapitado hacia el año 287. San Fermín se asoció a los trabajos de San Honesto de Nimes, apóstol de Navarra. Una vez consagrado obispo, predicó el Evangelio en Albi, en Agen, después en Auvernia, en Anjou, en Beauvais, y por último en Amiens, donde estableció su sede. Mucho hubo de sufrir por la fe y, después de crueles torturas, fue decapitado, alrededor del año 287 aproximadamente, por orden del prefecto Rictio Varo. Uno de los sucesores de San Fermín, llamado el Confesor, hizo edificar una iglesia sobre su tumba en San Acheul. El mismo día, en la vía Claudia, san Herculano, soldado y Márlir, el cual, en el imperio de Antonino, convertido a Cristo por los milagros acaecidos en el martirio de san Alejandro Obispo, después de muchos tormentos, fue por la confesión de la fe pasado a cuchillo. En Damasco, los santos Mártires Paulo y Tatta, su mujer, con sus hijos Sabiniano, Máximo, Rufo y Eugenio; los cuales, acusados de ser Cristianos, fueron atormentados con azotes y otros suplicios, y en medio de los tormentos entregaron sus almas a Dios. En Asia, el suplicio de los santos Bardomiano, Eucarpo y otros veintiséis Mártires. En Lyon de Francia, el tránsito de san Lupo, que de Anacoreta fue consagrado Obispo. En Auxerre, san Anacario, Obispa y Confesor. En Blois de Francia, san Solemnio, Obispo de Chartres, esclarecido en milagros. En el mismo día, san Principio, que fue Obispo de Soissons, y hermano de san Remigio Obispo. En Roma, el nacimiento de san Vicente María Strambi, Obispo de Macerata y de Tolentino, religioso de la Congregación de la Cruz y Pasión de Jesús, preclaro por el celo pastoral; al cual el Papa Pío XII puso entre los Santos. En Anagni, las santas Vírgenes Aurelia y Neomisia.