14 de septiembre _ Exaltación de la Santa Cruz Dm. - Rojo La Exaltación de la santa Cruz, cuando el Emperador Heraclio, vencido el Rey Cosroas, la trasladó de Persia a Jerusalén. Cosroes, rey de Persia, se llevó de Jerusalén la Cruz de Jesucristo, y Heraclio, emperador de Oriente, le declaró la guerra. Después de tres victorias debidas a la Santísima Virgen, Heraclio volvió a Jerusalén con la verdadera Cruz. Quiso llevarla en triunfo sobre sus hombros, pero una fuerza invisible lo detuvo a las puertas de la ciudad. El patriarca Zacarías le observó que sus suntuosas vestiduras contrastaban con la pobreza y humildad de Jesucristo. El emperador entonces se quitó su púrpura, su corona y su calzado, para vestir hábito de penitente. Así pudo entrar en la ciudad y llevar la Cruz hasta la cumbre del Calvario, el año 629. En Roma, en la vía Apia, san Cornelio, Papa y Mártir, el cual, en la persecución de Decio, después de haber sido desterrado, fue mandado azotar con plomadas, y luego degollar junto con otros veintiuno de ambos sexos. También el soldado Cereal y su mujer Salustia, a quienes el mismo Cornelio había instruido en la fe, fueron el mismo día decapitados. En África, el martirio de san Cipriano, Obispo de Cartago, esclarecidísimo en santidad y doctrina, el cual, imperando Valeriano y Galieno, al cabo de un penoso destierro, cortada la cabeza consumó el martirio a seis millas de Cartago, junto al mar. La memoria de dichos santos Cornelio y Cipriano se festeja a 16 de este mes. En Comana del Ponto, el tránsito de san Juan, Obispo de Constantinopla, Confesor y Doctor de la Iglesia, por el río de oro de su Elocuencia apellidado Crisóstomo; el cual, desterrado por la facción de sus enemigos, yllamado del destierro por decreto del Papa san Inocencio I, a causa de los malos tratamientos que ledieron sus guardas, entregó en el camino su alma a Dios. Su festividad se celebra el 27 de Enero, día en que su sagrado cuerpo fue trasladado por Teodosio el Joven a Constantinopla. A este preclarísimo predicador de la divina palabra declaró y constituyó el Papa Pío X celestial Patrono de los Oradores sagrados. En Tréveris, san Materno, Obispo, que fue discípulo del Apóstol san Pedro, y convirtió a la fe de Cristo las ciudades de Tongres, Colonia, Tréveris y otros pueblos vecinos. En Roma, el niño san Crescendo, hijo de san Autimio, que en la persecución de Diocleciano, por orden del Juez Turpilio, acabó la vida degollado en la vía Salaria. En África, el suplicio de los santos Mártires Crescenciano, Víctor, Rósula y General.