31 de julio _ San Ignacio de Loyola, Presbítero y confesor de la Fe , Dm. - Blanco En Roma, el nacimiento para el cielo de san Ignacio, Presbítero y Confesor, Fundador de la Compañía de Jesús, varón esclarecido en santidad y milagros, y celosísimo de propagar la religión católica por todo el mundo. El Sumo Pontífice Pío XI le constituyó en celestial Patrono de todos los Ejercicios espirituales. n. 1491 en Loyola, España; † 31 de julio de 1556 en Roma, Italia. Patrono de los jesuitas y de la Compañía de Jesús; retiros espirituales; soldados. La lectura de la vida de los santos inspiró a San Ignacio el amor a la santidad. Renunció a la gloria de las armas para alistarse bajo el estandarte de Cristo, y para trabajar por la gloria de Dios y la salvación de las almas. Se retiró a la gruta de Manresa, en la que llevó una vida muy austera. Fue allí donde compuso su admirable libro de los Ejercicios espirituales. Comenzó a estudiar la lengua latina a la edad de 33 años, y durante su permanencia en la Universidad de París, atrajo a varios compañeros con los que echó las bases de la Compañía de Jesús. Murió en el año 1556. En Milán, san Calimerio, Obispo y Mártir, el cual, en la persecución de Antonino, preso, acribillado de heridas, atravesada la cabeza con una espada y precipitado en un pozo, acabó la carrera de su martirio. En Cesarea de Mauritania, el suplicio de san Fabio, Mártir, que, rehusando llevar las banderas del Presidente, fue primero encarcelado durante algunos días, y examinado después una y otra vez, como perseverase inconmovible en la confesión de Cristo, fue por el Juez condenado a pena capital. En Sínada de Frigia Pacaciana, los santos Mártires Demócrito, Segundo y Dionisio. En Siria, el martirio de trescientos cincuenta santos Monjes, que por defender el Concilio de Calcedonia, fueron muertos por los herejes. En Ravena, el tránsito de san Germán, Obispo de Auxerre, muy esclarecido por su nacimiento, fe, sabiduría y gloriosos milagros, el cual libró enteramente la Gran Bretaña de las herejías de los Pelagianos. En Tagaste de África, san Firmo, Obispo, ilustre por la gloria de su confesión. En Sena de Toscana, la dichosa muerte de san Juan Columbino, que fue Fundador de la Orden de Jesuatos, y resplandeció en santidad y milagros.